Claustro del Monaterio de Cenarruza

El Monasterio

Localización

Monasterio de Zenarruza nevado

Zenarruza es una ladera de las estribaciones del Oiz, pico de 1025 metros de altitud, perteneciente a la sierra que separa la zona costera del interior.

Su espacio limitado nunca había propiciado el establecimiento de un barrio, pero si le dio cierta importancia el hecho de que en él se bifurcase el camino que entraba de Europa. Por eso llegó a ser una ruta comercial, que muchos han querido situar sobre una antigua calzada romana, restaurada a finales del siglo XVIII y que sube desde Bolivar al Monasterio.  El camino entraba por Irún y seguía la costa hasta Deva. De allí se adentraba hacia el interior en dirección de Markina-Xemein donde comenzaba el ascenso que le permitiría atravesar el monte Oiz y cruzar hacia el interior de la península.

Pero en Zenarruza el camino se dividía en dos, y un ramal torcía a la derecha  para seguir hacia Finisterre, es decir, el camino de Santiago. De hecho  fue siempre un importante enclave dentro de la ruta jacobea de la costa y su influencia se extendía más allá de la comarca superando el ámbito religioso.

Esta confluencia permitió la existencia de un refugio o albergue de caminantes, que pasados los siglos se convertiría en hospital de peregrinos, y alguna pequeña ermita u oratorio.

Por otra parte, como enclave estaba inserto en una zona estratégica, ya que en ella las dos familias poderosas que marcaban los destinos políticos de la provincia, los Oñaz y los Gamboa, campaban por estos lugares una veces en escaramuzas que los enfrentaban, otras en acciones sociopolíticas compartidas.

También su ubicación geográfica entre las cuencas de los rios Lea y Artibai, lo situaban en un espacio propicio para los cultivos, pastos, ganados y bosques, que le harían entrar en una zona de especial desarrollo económico. El siglo X, según muestran los documentos, traería acontecimientos que cambiarían sustancialmente el sentido y contenido de esta “ladera fría”.

El Nombre

Foto del Monasterio

Son varias las tesis que avalan el nombre de Zenarruza Ziortza, cuya etimología parece venir de Zinaurritza, del protovasco zinaurri (vascuence zihaurricastellano yezgo o saúco menor) más el sufijo –tza, –za que va unido a muchos nombres toponímicos de plantas, indicando abundancia, como cuando en castellano se dice, por ejemplo, romeral o maleza. El primer vocablo sería la denominación romance y el segundo la denominación vascuence. Algún autor en vez de yezgo habla de torvisco como significado de la variante Ceaurriac. En todo caso es la Ceaurica que puede leerse en el antiguo escudo del águila. Una etimología más popular lo hace derivar de Tzear Otza, que quiere decir ladera fría, lo que no aclara la –n– del nombre romance

Sintetizando, Zenarruza Ziortza serían dos líneas de evolución del mismo término, existiendo varias teorías sobre el modo como esto se produjo. El siguiente enlace muestra la compleja evolución de Zinaurritza Zenarruza y a Ziortza propuesta por la Academia vasca de la lengua 

Desde el año 2005, la localidad de Puebla de Bolivar, que hasta esa fecha estaba anexionada a Markina-Xemein, adoptó como nombre oficial Ziortza-Bolivar.

Por lo demás, lo de «ladera fría» también es cierto, pues aunque la cercanía del mar -8 km en línea recta y 15 por carretera- hace que el clima sea suave, la proximidad del monte Oiz, muchas veces nevado, los vientos fuertes que a veces la azotan y la humedad que propicia el intenso verde de su entorno, aumentan la sensación fría del lugar, aunque hacen también de él un lugar especialmente bello, marcado por un ámbito de silencio significativo y una armonía del paisaje que propicia un sentimiento de serenidad y de paz.